SILENCIOS ESTEREOFÓNICOS
Semana de trova, punk y hard rock con Silvio Rodríguez, Bad Religion y Aerosmith
Por: Félix Morriña
Después de disfrutar plenamente el reciente disco de Armando Palomas y su Tequila Son Machine, Que se muera el rock y que viva el mambo. Vol. 1 (Mocos Records-La Veladora Producciones, 2006-7), el cual recomiendo ampliamente (incluyendo los otros 10 discos que posee Armambo en su discografía netamente independiente), me dispongo a recomendarles las actividades de esta semana de abril, donde se atravesó la quincena, y por tanto, hay suficiente pasta para los viáticos que exigirán los conciertos masivos.
Inicia la semana el cantautor trovero cubano Silvio Rodríguez, quien ofrecerá un recital de dos horas y media en el Auditorio Nacional este lunes 16 y martes 17 de abril a partir de las 20 horas. Todos aquellos melómanos melancólicos ex universitarios comprometidos, a quienes no les importa que el compositor de Ojalá, Sueño con serpientes, Playa Girón y un centenar de memorables piezas (de 500 registradas), se haya entregado a los placeres de la burocracia cultural isleña, estarán presentes en una de las 10 mil butacas del recinto de Reforma y Campo Marte, Polanco, México DF.
Silvio Rodríguez trae bajo el brazo su reciente producción Érase que se era (2006), un disco de 26 temas, del cual Judith es el tema más destacado, según su propia campaña de promoción. Le siguen Todo el mundo tiene su Moncada, Oda a mi generación, El día en que voy a partir, La canción de la trova, El papalote, Fusil contra fusil y El matador, entre otras.
Según informes de la compañía promotora que lo trae a México (Ocesa), Silvio Rodríguez estará por vez primera en países centroamericanos donde nunca ha estado tocando en vivo (Salvador, Guatemala y Nicaragua) y pisará naciones donde antes fue prohibido por razones políticas, como Chile, que en el periodo de la dictadura de Augusto Pinochet no podía ni pisar territorio andino, ni su música ser promovida.
A Chile fue en el 2005 y le fue muy bien, después de tantos años sin ser visto y escuchado en directo, pero sí estudiado en las sombras o en el anonimato por los estudiantes universitarios. Ahora irá al mismísimo escenario de la Quinta Vergara del Festival de Viña del Mar, donde le auguramos varios minutos de pie del respetable entre nutridos aplausos.
Silvio Rodríguez tiene en su historial 25 discos, algunas compilaciones y homenajes. Inició su vida musical en 1975 y desde entonces su música ha sido apreciada por varias generaciones. Para muchos es la viva imagen e icono de la nueva trova a nivel mundial.
Para el miércoles 18 de abril, el Vive Cuervo Salón (antes Salón 21) recibirá a la banda punk-hard core en activo más importante de la escena internacional: Bad Religion, quien promueve por cuanto foro los contrate su nuevo material The Empire Strikes First (Epitaph Records), el cual si no lo tienes, ni lo has escuchado, esa noche será tu mejor oportunidad para hacer ambas cosas.
Como muchos saben, Bad Religion utiliza un metódico y bien estructurado discurso político muy irreverente que los ha colocado como una de las bandas punk, verdaderamente punk no tonterías del mercado gringo, en pleno uso de sus facultades.
La agrupación está compuesta por Greg Graffin (voz), Brett Gurewitz (lira), Greg Hetson (seis cuerdas), Brian Baker (guitarra), Jay Bentley (bajo) y Brooks Wackerman (batería) se formó a principio de los años ochenta en Los Angeles, California y ellos van mucho más allá de la estética tradicional del ritmo gestado a finales de los años setenta en Inglaterra.
Con su más reciente disco The Empire Strikes First (El Imperio Ataca Primero) queda muy clara la postura del sexteto con su condena y rechazo a la administración del presidente gringo George Bush y el empleo de su Guerra Preventiva, al tiempo que cuestionan la cada vez más perturbadora e incrementada presencia religiosa en la política estadounidense.
En esta nueva visita a México, los seguidores punks podrán ponerse al día en materia política subterránea con Bad Religion y sobre todo escucharlos en un foro ad hoc para este tipo de encuentros. Todavía hay boletos.
El próximo domingo 22 de abril pisará de nueva cuenta México la banda de rock nacida en Boston, Estados Unidos, Aerosmith, sólo que esta vez será el Foro Sol (antes, en enero de 1994, fue el Palacio de los Deportes) el sitio donde ofrezca concierto en la capital del país (previamente estará en el Estadio Universitario de Monterrey, Nuevo León, el miércoles 18 de abril).
Hasta donde se sabe no tienen una nueva producción bajo el brazo, pero vienen al país con una larga historia de excesos, escándalos y buen hard rock-power ballads para todos los amantes de la música otrora pesada, hoy digerible y light.
Sin duda tocarán sus exitosas rolas provenientes de sus discos Aerosmith, Toys in the Attic, Rocks, Permanent Vacation, Pump y Get a Grip. Inevitablemente tocarán todas y cada una de las piezas de las que se hicieron videos y que marcaron un hito entre los jóvenes de los años ochenta, hoy treintañeros y cuerentones nostálgicos.
Desconozco quién será la agrupación o solista telonero, pero seguro estoy que será un buen concierto para saber si todavía estos ruqueros todavía la arman en grande o definitivamente mandarlos al museo o a la cajita de los recuerdos. Suerte en cada uno de estos encuentros.
Por: Félix Morriña
Después de disfrutar plenamente el reciente disco de Armando Palomas y su Tequila Son Machine, Que se muera el rock y que viva el mambo. Vol. 1 (Mocos Records-La Veladora Producciones, 2006-7), el cual recomiendo ampliamente (incluyendo los otros 10 discos que posee Armambo en su discografía netamente independiente), me dispongo a recomendarles las actividades de esta semana de abril, donde se atravesó la quincena, y por tanto, hay suficiente pasta para los viáticos que exigirán los conciertos masivos.
Inicia la semana el cantautor trovero cubano Silvio Rodríguez, quien ofrecerá un recital de dos horas y media en el Auditorio Nacional este lunes 16 y martes 17 de abril a partir de las 20 horas. Todos aquellos melómanos melancólicos ex universitarios comprometidos, a quienes no les importa que el compositor de Ojalá, Sueño con serpientes, Playa Girón y un centenar de memorables piezas (de 500 registradas), se haya entregado a los placeres de la burocracia cultural isleña, estarán presentes en una de las 10 mil butacas del recinto de Reforma y Campo Marte, Polanco, México DF.
Silvio Rodríguez trae bajo el brazo su reciente producción Érase que se era (2006), un disco de 26 temas, del cual Judith es el tema más destacado, según su propia campaña de promoción. Le siguen Todo el mundo tiene su Moncada, Oda a mi generación, El día en que voy a partir, La canción de la trova, El papalote, Fusil contra fusil y El matador, entre otras.
Según informes de la compañía promotora que lo trae a México (Ocesa), Silvio Rodríguez estará por vez primera en países centroamericanos donde nunca ha estado tocando en vivo (Salvador, Guatemala y Nicaragua) y pisará naciones donde antes fue prohibido por razones políticas, como Chile, que en el periodo de la dictadura de Augusto Pinochet no podía ni pisar territorio andino, ni su música ser promovida.
A Chile fue en el 2005 y le fue muy bien, después de tantos años sin ser visto y escuchado en directo, pero sí estudiado en las sombras o en el anonimato por los estudiantes universitarios. Ahora irá al mismísimo escenario de la Quinta Vergara del Festival de Viña del Mar, donde le auguramos varios minutos de pie del respetable entre nutridos aplausos.
Silvio Rodríguez tiene en su historial 25 discos, algunas compilaciones y homenajes. Inició su vida musical en 1975 y desde entonces su música ha sido apreciada por varias generaciones. Para muchos es la viva imagen e icono de la nueva trova a nivel mundial.
Para el miércoles 18 de abril, el Vive Cuervo Salón (antes Salón 21) recibirá a la banda punk-hard core en activo más importante de la escena internacional: Bad Religion, quien promueve por cuanto foro los contrate su nuevo material The Empire Strikes First (Epitaph Records), el cual si no lo tienes, ni lo has escuchado, esa noche será tu mejor oportunidad para hacer ambas cosas.
Como muchos saben, Bad Religion utiliza un metódico y bien estructurado discurso político muy irreverente que los ha colocado como una de las bandas punk, verdaderamente punk no tonterías del mercado gringo, en pleno uso de sus facultades.
La agrupación está compuesta por Greg Graffin (voz), Brett Gurewitz (lira), Greg Hetson (seis cuerdas), Brian Baker (guitarra), Jay Bentley (bajo) y Brooks Wackerman (batería) se formó a principio de los años ochenta en Los Angeles, California y ellos van mucho más allá de la estética tradicional del ritmo gestado a finales de los años setenta en Inglaterra.
Con su más reciente disco The Empire Strikes First (El Imperio Ataca Primero) queda muy clara la postura del sexteto con su condena y rechazo a la administración del presidente gringo George Bush y el empleo de su Guerra Preventiva, al tiempo que cuestionan la cada vez más perturbadora e incrementada presencia religiosa en la política estadounidense.
En esta nueva visita a México, los seguidores punks podrán ponerse al día en materia política subterránea con Bad Religion y sobre todo escucharlos en un foro ad hoc para este tipo de encuentros. Todavía hay boletos.
El próximo domingo 22 de abril pisará de nueva cuenta México la banda de rock nacida en Boston, Estados Unidos, Aerosmith, sólo que esta vez será el Foro Sol (antes, en enero de 1994, fue el Palacio de los Deportes) el sitio donde ofrezca concierto en la capital del país (previamente estará en el Estadio Universitario de Monterrey, Nuevo León, el miércoles 18 de abril).
Hasta donde se sabe no tienen una nueva producción bajo el brazo, pero vienen al país con una larga historia de excesos, escándalos y buen hard rock-power ballads para todos los amantes de la música otrora pesada, hoy digerible y light.
Sin duda tocarán sus exitosas rolas provenientes de sus discos Aerosmith, Toys in the Attic, Rocks, Permanent Vacation, Pump y Get a Grip. Inevitablemente tocarán todas y cada una de las piezas de las que se hicieron videos y que marcaron un hito entre los jóvenes de los años ochenta, hoy treintañeros y cuerentones nostálgicos.
Desconozco quién será la agrupación o solista telonero, pero seguro estoy que será un buen concierto para saber si todavía estos ruqueros todavía la arman en grande o definitivamente mandarlos al museo o a la cajita de los recuerdos. Suerte en cada uno de estos encuentros.
0 comentarios