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IMPULSO Estado de México || Sección Cultural

El debate que nunca termina: la cultura como un derecho

El debate que nunca termina: la cultura como un derecho

Con el ejercicio cultural como un derecho constitucional, se podrá dar el primer paso a una consolidación de políticas culturales, actividades, programas y consumo de la cultura

Por: Silvia Márquez / Redacción

Ayer, el diputado federal José Alfonso Suárez del Real afirmó que en materia cultural todo está sostenido con "alfileres", por lo que puso sobre la mesa el tema de dar certeza jurídica, constitucionalidad incluída, al sector artístico y cultural.

El legislador continuó su declaración diciendo que ante ese panorama hipotético, se podría dar "mayor certidumbre al quehacer cultural en cualquiera de sus manifestaciones, porque ya no estaría sujeto a los vaivenes de modas, pues la cultura es un derecho y no una mercancía".

Hay que recordar que la Comisión de Puntos Constitucionales aprobaría ayer un dictamen para establecer en la Constitución el derecho al acceso a la cultura, así como una ampliación de las facultades de los diputados para legislar en la materia. Sin embargo, la falta de asistencia de los diputados a la sesión hizo que la discusión fuera aplazada hasta el 10 de septiembre.

Sobre la tribuna se discutiría la propuesta de los diputados José Alfonso Suárez del Real, Emilio Ulloa Pérez y Aurora Cervantes, integrantes de la Comisión de Cultura en la Cámara de Diputados Federal, quienes presentaron un proyecto en el que, además de señalar el rezago en la legislación cultural del país, sostienen que la palabra cultura únicamente se consigna en la Carta Magna en dos artículos: en el Tercero, donde se menciona que la educación deberá fortalecer la cultura nacional, y l 123 que habla de que los salarios mínimos generales deberán ser suficientes para satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural.

El secretario de la comisión respectiva en la Cámara de Diputados, Suárez del Real, dijo que el primer paso para crear una Ley General de Cultura es reconocer en la Constitución, "de manera explícita", el derecho al acceso a la cultura, el respeto a los derechos culturales y la facultad del Congreso para legislar en la materia.

Por otra parte el presidente de la Comisión de Cultura, Emilio Ulloa Pérez, ha mencionado en múltiples ocasiones que si bien no es necesario contar con un permiso explícito para tener acceso a la cultura, sí es importante tener el fundamento constitucional que garantice su pleno ejercicio.

La propuesta que será votada el próximo 10 de septiembre adiciona un párrafo noveno al artículo 4 de la Constitución, para quedar de la siguiente manera: "Toda persona tiene derecho al acceso a la cultura y al disfrute de los bienes y servicios que presta el Estado en la materia, así como el ejercicio de sus derechos culturales. El Estado promoverá los medios para la difusión y desarrollo de la cultura, atendiendo a la diversidad cultural en todas sus manifestaciones y expresiones con pleno respeto a la libertad creativa. La ley establecerá los mecanismos para el acceso y participación a cualquier manifestación cultural. El Estado tutelará estos derechos".

La reforma también considera una adición a la fracción XXV del artículo 73 constitucional, para agregar entre las facultades del Congreso de la Unión, la de "legislar en materia de derechos de autor y otras figuras de la propiedad intelectual relacionadas con la misma".

También se propone la adición de la fracción XXIX-0, para establecer como facultad del Poder Legislativo Federal la de expedir leyes que establezcan las bases sobre las cuales la Federación, los estados, los municipios y el Distrito Federal, coordinarán sus acciones en materia de cultura, salvo las reservadas al gobierno federal en materia de conservación y preservación de monumentos históricos y zonas arqueológicas.

El proceso legislativo aclara que una vez que el dictamen sea aprobado por la Comisión de Puntos Constitucionales, será programado para leerlo ante el pleno del Congreso de la Unión y posteriormente votarlo. Si se obtiene la mayoría, la minuta será enviada al Senado de la República para su ratificación o rectificación.
En caso que haya ratificación se comunicará a las legislaturas del país para que inicien el proceso de análisis, dictaminación y votación, y cuando se tenga a 16 Congresos que lo hayan aprobado, se dará por firme la reforma constitucional y se instruirá a que se efectúe la reforma al texto y entre en vigor al día siguiente de ser publicado en el Diario Oficial de la Federación.

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