Silencios Estereofónicos
Los que tenemos esclerosis múltiple, ya no podemos caminar, ahora volamos: José Cruz Camargo, de Real de 14
Por: Félix Morriña
Foto: Pedro González
Me sumé a la difusión masiva del concierto-homenaje a una de las agrupaciones más importantes de blues, jazz, rock mexicano que ha pasado a la historia, debido a que su cantante, compositor, armoniquista y líder, José Cruz Camargo, está en fase preterminal de una terrible enfermedad llamada esclerosis múltiple.
Como muchos saben, me refiero a la agrupación-ex asociación civil Real de 14, la primera en pisar suelo ruso a finales de la década de los años ochenta, la primera en representar a México cabalmente en los géneros antes mencionados en cuanto foro fue solicitado, la primera en ser reconocida por componer poesía musicalizada en el idioma de Cervantes por los críticos nacionales y extranjeros, la primera en muchos sentidos y una de las más importantes de Hispanoamérica.
Amigo José Cruz Camargo no pude ir a tu concierto-homenaje del sábado pasado en el Centro Cultural Ollin Yoliztli, porque francamente me acobardé. No tuve las fuerzas suficientes para verte en una silla de ruedas. No me atreví a viajar sin auto casi tres horas de Toluca-Metepec al sur de la ciudad de México para verte de esa manera, pero sé que tengo una oportunidad más para el mes de septiembre en la que volverás a un escenario para trabajar, sí para "trabajar" y ganarte el sustento y para pagarte los costos de la carísima medicina con la que tratas la esclerosis múltiple.
Sé que gastas más de 14 mil pesos al mes. Cantidad difícil de juntar, más para alguien que está prácticamente solo (me enteré que dijiste en el concierto que tu mujer te abandonó cuando supo de tu terrible enfermedad. Son situaciones difíciles, pero en eso no me meto, sólo quiero comentar que tu hija María José está contigo en las buenas y en las malas), a pesar de las muestras de cariño de tus miles de seguidores por todo el país.
Ese día del concierto, todos aportaron su granito de arena (100 pesos cada persona) y sé que cientos de personas se quedaron afuera, muchos de ellos habían pagado su boleto, pero llegaron tarde. Fueron cinco horas de concierto. ¡Qué bien! Sirvan estas imágenes de mi amigo de la lente Pedro González para que los lectores se den una idea de cómo estuvo el recital.
No es fácil hablar de un gran amigo enfermo despidiéndose como un padre cuando te bendice por última vez, como al hermano mayor en su último estertor, como al camarada que fallece en tus brazos en una batalla memorable, si es que existe tal; como el músico que te influenció por espacio de dos décadas y que te enseñó que la vida se vive tan intensamente como un blues en un campo de algodón al rojo de la tarde.
José Cruz Camargo y al resto de los integrantes de Real de 14, gracias por haber compuesto "Azul", "Tiempos oscuros", "Mis amigos muertos", "Voces interiores", "Contra ley", "Azul" y "Rojo" (ambos en vivo); "Cicatrices", "Nueve" y "Voy a morir", discos en donde te mostraste plenamente como un literato de la música contemporánea nacional (gracias a las influencias del vate Luis Bañuelos), muy a pesar de mucha raza que te llamaba pretensioso y preciosista.
Como dato adicional muy importante quiero decirles que todos estos discos (junto a un DVD que resume la historia de Real de 14, llamado "De cierto azul") están disponibles, gracias a la distribución que hace de ellos por todo el país Fonarte Latino, un disquera independiente que ha marcado línea a seguir y que continúa granando a grupo sus solistas destacados.
Hubo momentos en los que les hice saber a los integrantes de Real de 14, de manera periodística y amistosa, que ciertas canciones no estaban a la altura de la banda, pero sabías José Cruz Camargo cómo contestar, sabías dirigirte muy bien con los medios y justificar tus acciones dentro de tu proceso creativo.
También te dirigías con respeto hacia tus viejos compañeros de viaje (José Iglesias, Severo Viñas, Juan Cristóbal Pérez Grobet, entre otros tantos que participaron en el grupo), como también me consta que lo hiciste con los nuevos integrantes y fieles colaboradores de Real de 14 (Julio Zea, Salvador Arceo y Luis Ernesto Martínez, entre otros), con lo cual no debería existir queja alguna de parte de nadie.
Con tu público sabías hacer migas, sabías complacerlo y le exigías mejorar a través de la música. Amigo José Cruz Camargo, duele mucho saber que estés molesto y separado profesional y emocionalmente con el resto de los integrantes de Real de 14, tus motivos tendrás y sé que antes de que partas de este mundo, juntos resolverán este malentendido, o se esclarezca el abuso si existe tal de parte de ellos (¡huele a gato encerrado!, se dice por ahí), por el bien de ustedes, por el bien del grupo y su prestigio intachable, y por nosotros, su público.
Los demás integrantes de Real de 14 expresaron su sentir en una carta publicada en la página de Internet del grupo, la cual de paso está muy descuidada, pero tu gente más cercana ha hecho buen trabajo con el myspace, tanto en la versión grupal como en la personal. Sólo tú, José Cruz Camargo, pudiste manifestarte públicamente, de cara al sol durante tu concierto-homenaje titulado paradójicamente "Pero qué bien te ves", el pasado sábado 4 de agosto en la Sala Silvestre Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli.
Recibiste un merecido homenaje en vida de parte de tu gente, de tu público, de músicos de la talla de Memo Briceño, Nina Galindo, Jaime López, Follaje, Paco Barrios "El Mastuerzo" y Los Blueserables, tus alumnos más aventajados. Incluso hasta León Chávez Texeiro estuvo en el recital como agregado cultural. Siempre me pregunté por qué no participó Betsy Pecannins, una de las voces autorizadas del blues, con quien Real de 14 empezó su carrera como músicos de soporte a mediados de la década de los ochenta. Nadie me sabe decir nada.
Lo único cierto es que Real de 14 ya no existe como tal desde hace casi dos años, ni creo que José Cruz Camargo componga un disco bajo ese nombre de vivir más tiempo del programado por los médicos.
También me enteré que a José Cruz Camargo le hicieron una limpia para purificar su espíritu durante el concierto/homenaje, con lo cual su entidad física todavía sigue con nosotros, pero su otro yo está ya en el desértico paraíso de Real de 14, ese pueblito insertado en el Estado mexicano de San Luis Potosí, de donde tomó su nombre para crear a esa culta agrupación que ha hecho felices a miles de seres y entidades míticas.
Desde este espacio periodístico, le mandamos un fuerte abrazo a José Cruz Camargo, que seguros estamos hizo el titánico esfuerzo para entonar sus canciones que marcaron historia al lado de Real de 14, entre ellas, "Jeny", "Contra ley", "Dorina y Abel", "Mujer sucia", "Cicatrices" (al lado de su hija María José), "Vaso de ginebra", "Tres segundos" (una canción nueva) y "Sostente de pie", con la cual oramos para que en realidad tengamos de pie a este ser creativo que tanta falta le hace a la música contemporánea mexicana. ¡Pepe Cruz, nos vemos en el que sigue! Aguante maestro, tal y como dijiste: "Los que tenemos esclerosis múltiple, ya no podemos caminar, ahora volamos".
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kenneth -